Durante mayo, las ventas al mayoreo, producción y exportación de la industria de vehículos pesados totalizaron en 3,462, 12,141 y 9,932 unidades con descensos de 28.7%, 35.2% y 33.1%, respectivamente, en su comparativo contra el mismo mes del año anterior. Así lo dio a conocer la Asociación Nacional de Productores de Autobuses, Camiones y (ANPACT).
Para los primeros cinco meses del año, la directora de Comercio Exterior y Estudios Económicos de la ANPACT, Virginia Olalde López-Gavito, destacó descensos en esos los mismos rubros.
Entre enero y mayo, la comercialización al mayoreo fue de 20,958 vehículos, con bajas de 1.4%. La manufactura llegó a 79,900 unidades, lo que significó disminuciones de 15.0%. Mientras que los envíos a otras latitudes culminaron el periodo en 63,404 vehículos, con descensos de 15.8%.
Por su parte, Alejandro Osorio Carranza, director de Asuntos Públicos y Comunicación de la Asociación compartió que la disminución en los tres indicadores se debe a una combinación de factores.
“Por un lado, una moderación en el crecimiento de la demanda de vehículos pesados en EE.UU. que es el principal destino de las exportaciones. Por otro lado, la creciente importación de vehículos pesados usados en nuestro país”.
De enero a abril 2024 se ha observado un incremento de 379.7% en las importaciones. Comparado con el mismo periodo de 2022 y de 157.4% contra los cuatro primeros meses de 2023.
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“Esta situación no solo afecta las ventas de vehículos nuevos, sino presiona el mercado secundario de vehículos usados a la baja. En ese sentido, es muy importante que se actualice el acuerdo ambiental de la Secretaría de Economía y la SEMARNAT, que desde 2004 está vigente. El acuerdo permite que vehículos chatarra con tecnologías obsoletas y más contaminantes puedan ingresar al país”, añadió.
Otro factor que incide en los resultados, es una disrupción reciente en la cadena de suministro, particularmente de sistemas de visión (espejos) para vehículos pesados.
“Esto se debe a que la principal fabrica productora de espejos para la industria establecida en Escobedo, Nuevo León, se incendió en abril pasado. Interrumpiendo por completo sus operaciones. Lo que ha detenido la producción de esta autoparte que es esencial para que los vehículos ya producidos puedan ser entregados y dados de alta. Este hecho está afectando que sigan entregándose pedidos de vehículos porque es una autoparte esencial para la seguridad vial”, afirmó el directivo de ANPACT.
