La Asociación Nacional de Productores de Autobuses, Camiones y Tractocamiones (ANPACT) informó que las ventas sumaron 21,187 unidades en los primeros cinco meses del año. Estas cifras confirman el crecimiento constante y el éxito de la industria en este período.
En conferencia de prensa, Miguel Elizalde, presidente ejecutivo de ANPACT, resaltó que, a pesar de las disminuciones en el crecimiento económico en otros sectores, la industria automotriz dedicada a la fabricación de vehículos continúa obteniendo resultados positivos.
Describió que las cifra, de 21,187 unidades, se quedó únicamente 262 unidades por debajo del récord alcanzado en 2008, cuando se vendieron 21,660 unidades.
Miguel Elizalde, describió que en mayo, en comparación con el mismo mes de 2022, se registró un aumento del 50.4% en las ventas. Adicionalmente, se obtuvo un crecimiento del 34.1% en las exportaciones y un incremento del 38.9% en la producción.
Esto se traduce en un total de 4,854 unidades vendidas al por mayor, 14,845 unidades exportadas y 18,728 unidades producidas.
“Continuamos con los esfuerzos para recobrar las cifras previas al inicio de la emergencia sanitaria. Mediante acciones sostenidas de planeación, resiliencia, inversión, productividad e innovación tecnológica”, destacó el presidente de ANPACT.
Agregó que los incrementos por encima de lo registrado en 2019 se mantienen; por ejemplo, al comparar el periodo de enero a mayo de aquel año con mayo de 2023, las ventas al mayoreo se han elevado 23.9%, la exportación 7.7% y la producción 8.7%”, resaltó.
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En cambio, se informó que en relación a 2022, los resultados acumulados hasta el quinto mes del año presentan aumentos notables en diferentes aspectos. Las cifras revelan incrementos significativos del 37.5% en las ventas al por mayor, un 22.6% en las exportaciones y un 27.0% en la producción.
Miguel Elizalde adelantó que la industria se encuentra preparada para responder a la demanda de producción generada por el fenómeno del nearshoring. En este contexto, las cadenas de producción en México y la región del T-MEC pueden establecer un círculo virtuoso que beneficie tanto al sector como al país en su conjunto.